Los seres humanos creamos cultura. Nuestras formas de pensar, de sentir y de actuar, la lengua que hablamos, nuestras creencias, la comida y el arte, son algunas expresiones de nuestra cultura.
Este conjunto de saberes y experiencias se transmite de generacion en generacion por diferentes medios. Los niños aprenden de los adultos y los adultos de los ancianos. Aprenden de lo que oyen y de lo que leen; aprenden también de lo que ven y experimentan por sí mismos en la convivencia cotidiana. Así se heredan las tradiciones.
Compartimos 2 de los platos típicos de nuestra Cultura Marroquí. Tradiciones que supimos disfrutar de nuestros abuelos, tradiciones que sabemos transmitir a nuestros hijos y nietos.
Plato principal
Pollo a la Moruna
INGREDIENTES
4 muslos de pollo o un pollo entero trozado.
1 cebolla mediana
12 pasas de ciruelas
12 damascos (orejones) cortados en cuartos.
Pasas de uva (al gusto).
Una ramita de canela.
Un vaso (de 250 ml.) de vino blanco.
Sal.
Aceite
PREPARACIÓN
Echar aceite en una cazuela poco alta y sofreír ligeramente la cebolla.
Colocar encima la carne sazonada (no debe estar amontonada) y dejar unos 5 ó 6 minutos a fuego suave hasta que el po
150 gramos de azúcar
llo
se impregne del sabor de la cebolla.
Añadir el resto de ingredientes.
Cocinar el pollo a fuego muy bajo durante una hora y media para que vaya tomando un color dorado y el sabor dulce del resto de los ingredientes.
Postre «Marronchinos»
Ingredientes:
250 gramos de almendras con piel
1 huevo entero y una yema.
canela en polvo dos a tres cucharitas
1 cucharadita de clavo de olor en polvo
Nevado para decorar y confites chiquititos de colores
Pelar la mitad de las almendras y dejar la otra mitad sin pelar. Molerlas y mezclarlas con el resto de los ingredientes y dejar reposar un dia esta mezcla.
Se forman bolitas chiquitas y se colocan en una bandeja de horno previamente engrasada, se hornean a 150 º C durante 10 minutos.
Se prepara el nevado o cubierta blanca con azucar glass y jugo de limón o agua, después de sacar los marronchinos del horno se pintan con el nevado y se les echa por encima los confites de colores y se dejan secar.